• Se une a la iniciativa NextWave con la intención de hacer uso de este residuo antes de que vaya a parar al mar, siendo parte de la primera cadena mundial de suministro comercial de plástico oceánico
• Está previsto que en 2019 estén listos los primeros prototipos de productos fabricados con este plástico
• Existen más de 86 millones de toneladas de plásticos en nuestros océanos e IKEA quiere ser parte activa en la lucha contra este tipo de contaminación

IKEA anunció este mismo año el compromiso de retirar para 2020 todos los productos de plástico de un solo uso, como paso previo a su transformación en un negocio completamente circular en 2030.

Como parte de este proyecto, IKEA ya es miembro de NextWave, una iniciativa en la que participan empresas privadas, científicos y ONG para integrar de forma escalable el plástico que termina en los océanos en productos de consumo.

El plástico que va a parar al océano es aquel que se encuentra dentro de un radio de unos 50 km. de distancia de una vía fluvial (ríos, lagos, océanos y mares). Si no se recoge, estos residuos de plástico acabarán en el mar abierto formando parte de los más de 86 millones de toneladas que ya hay en la actualidad.